Lograr ser una empresa unicornio no es nada fácil y, aunque la gran mayoría tienen su origen en Estados Unidos, actualmente 2 de ellas tienen sangre colombiana. Entérate de la batalla que han tenido que enfrentar para conseguir este codiciado título, su significado, cuáles son sus características y qué las hace tan exitosas.
Además, conoce el ranking de las empresas unicornio más representativas de latinoamérica y del mundo y algunos detalles del movimiento que se ha creado en oposición a este agresivo fenómeno económico.
¿Por qué reciben este nombre?
Cuando hablamos de un unicornio, es inevitable que llegue a nuestra mente la imagen de aquel hermoso animal de los cuentos infantiles; pero ¿qué tienen que ver ellos con el ámbito empresarial?
Pues bien, la primera persona en emplear el término unicornio en este contexto, fue la especialista en capital de riesgo, Aileen Lee, fundadora de Cowboy Ventures. Este es un fondo de capital semilla cuyo propósito es apoyar el crecimiento de aquellas startups (empresas emergentes) tecnológicas, que crean productos que permiten re-imaginar el futuro.
Lee utilizó el término unicornio, en noviembre de 2013, para referirse a algunas de estas compañías que estaban consiguiendo ser valoradas en mil millones de dólares, poco tiempo después de haber sido creadas y sin haber sido compradas por otra empresa; algo que en otra época podría haber sido considerado tan fantástico y mitológico como los unicornios.
Como si fuera poco, esto no solo dejó de ser un mito, sino que sobrepasó el ámbito tecnológico y comenzó a darse cada vez con mayor frecuencia en otros sectores del mercado. Así, lo que empezó con aproximadamente 40 compañías unicornio contabilizadas por Lee en ese entonces, aumentó en un 3.000% con el paso del tiempo. Durante la década pasada, por ejemplo, nacieron en promedio cuatro compañías de este tipo por año en el mundo.
Características de las empresas unicornio
- Todas comenzaron como emprendimientos.
- Llevan menos de diez años en el mercado. Son empresas jóvenes, capaces de generar nuevas necesidades mientras continúan dando sus primeros pasos.
- El equipo inicial de las empresas unicornio está conformado por un promedio de tres emprendedores.
- En el 90 por ciento de ellas, sus fundadores se conocieron desde la escuela o lo hicieron en su lugar de trabajo.
- Estos amigos emprendedores comenzaron su negocio con un promedio de edad entre 30 y 35 años de edad.
- Sus emprendimientos surgieron en pleno auge de las redes sociales y las aprovecharon para crecer y consolidarse.
- Estas Startups unicornio crecen de una manera acelerada. Esto, lo consiguen a través de una estrategia denominada «Get Big Fast”, la cual consiste en mantener una progresiva consolidación en el mercado, reduciendo sus precios, con el fin de ofrecer mejores ventajas competitivas y llegar a mayor cantidad de clientes.
- Son compañías B2C, esto quiere decir que su estrategia comercial se basa en llegar directamente al consumidor final o al cliente.
- Las financiación de las empresas unicornio es 100% privada y no cotizan en la Bolsa.
- Todas han logrado generar, aproximadamente, 26 veces más valor por cada dólar privado invertido.
- Las empresas unicornio son innovadoras y disruptivas, es decir, siempre dan un enfoque tecnológico a sus productos o servicios, de manera que puedan generar un impacto fuerte. Este es el caso de compañías como Microsoft y Apple, en los setenta; Cisco, en los años ochenta; Amazon y Google, en los noventa; y Facebook, en la década pasada. Esta última dejó de ser considerada una empresa unicornio desde que salió a la bolsa.
En definitiva, el acelerado crecimiento de las empresas unicornio está directamente asociado a la implementación de nuevas tecnologías, como: la impresión 3D, los chatbots, la inteligencia artificial y la realidad aumentada, entre otras. Sin embargo, por más herramientas con las que se cuente, es fundamental que los emprendedores reúnan las cualidades, aptitudes y actitudes necesarias para lanzar y mantener su producto o servicio en el mercado.
Las 5 empresas unicornio más exitosas del mundo
Debido a la constante aparición de este tipo de empresas, la revista Fortune creó la «Lista Unicornio», en la cual estableció el ranking de las mejor valoradas a nivel mundial. En la lista de 2106, los 5 primeros lugares estaban ocupados por Uber, Xiaomi, Airbnb, Palantir y DidiKudai.
A agosto de 2018, los 5 primeros lugares fueron ocupados por las siguientes empresas:
1. Uber
Esta empresa de servicios de transporte privado, nació en San Francisco, California. Fue fundada en 2009, por Travis Kalanick y Garrett Camp. Actualmente, este unicornio ha desarrollado servicios de transporte de carga y despacho de comida, está valorado en más de 67 billones de dólares y hace presencia en más de 400 ciudades alrededor del mundo.
https://www.instagram.com/p/BNhBOToB8_W/
2. Didi Chuxihg
Este unicornio chino es la competencia directa de Uber. Fue fundada en 2012 por Wu Rui, Zhang Bo y Cheng Wei. Está valorada en más de 55 mil millones de dólares y opera en países como: México, Brasil, Taiwán, Australia y Japón, entre otros.
3. Meituan-Dianping
Este es otro unicornio chino fundando en 2010 por Wang Xing. Se dedica a comprar sitios web para servicios minoristas y productos de consumo local. Compite con Tencent y Alibaba en el mercado del comercio electrónico chino. Valorada en 30 mil millones de dólares, la aplicación ofrece una amplia gama de servicios como reservaciones de hotel y despacho de comida, entre otros.
4. Airbnb
Esta plataforma virtual permite que cualquier persona pueda ofrecer, buscar y reservar diferentes espacios para ser usados como hospedaje, en cualquier parte del mundo, a través de sus teléfonos móviles y de la Internet. Fue creada por Brian Chesky, Joe Gebbia y Nathan Blecharczyk. Nació en San Francisco California, en 2009. Actualmente está valorada en 25.5 billones de dólares y está presente en 192 ciudades.
5. SpaceX
Space Exploration Technologies Corporation, es una de las empresas unicornio del millonario emprendedor Elon Musk. Es una empresa privada estadounidense de servicios aeroespaciales, que se encuentra construyendo el cohete de prueba Falcon Heavy, con el cual su fundador aspira tener la primera compañía en llevar personas a Marte o a la Luna.
Como lo vaticinó la revista Forbes, algunas de las empresas que estuvieron a la cabeza del ranking de las compañías unicornio más valiosas del mundo en años anteriores, decidieron salir de la lista y lanzarse a la Bolsa, como ya lo hizo Facebook. Ellas fueron: Snapchat(febrero de 2017), Dropbox (en febrero de 2018), Spotify (en abril de 2018) y Xiaomi(en junio de 2018).
Otras empresas unicornio reconocidas en el ámbito internacional, son: Pinterest, Twitter, Cabify, WeWork, Linkedin y Tango.
Hasta el momento, Estados Unidos figura como el país número uno en la creación de empresas unicornio. Sin embargo, se espera que países como India y China continúen lanzando al mercado, cada vez más, compañías de estas características.
Según los expertos, durante los próximos años continuará en aumento el número de estas empresas, mientras se conoce la evolución de aquellas que surgieron primero en el mercado.
Rappi, la primera empresa unicornio de Colombia
En septiembre de 2018, tan solo 3 años y 8 meses después de su creación, la plataforma de entregas a domicilio colombiana Rappi, consiguió lo que muy pocas han podido alcanzar, a pesar de llevar décadas de actividad: llegó a la cifra mítica de los mil millones de dólares, consolidándose así como la primera empresa unicornio de Colombia.
Rappi, cuyo nombre deriva de la palabra “rápido”, fue fundada en Bogotá, en 2015, por dos caleños y un bogotano: Simón Borrero (34 años), Felipe Villamarín (30 años) y Sebastián Mejía (33 años). Los jóvenes emprendedores, crearon la empresa con la idea de ofrecer a los colombianos una aplicación para hacer favores.
Su principal ventaja es que la aplicación está disponible para los sistemas iOS y Android y, si bien es cierto que es comúnmente usada para solicitar comida de restaurantes, sus más de 800 colaboradores recogen y llevan cualquier cosa de un lugar a otro; además, hacen compras y cualquier tipo de actividad que el cliente no esté en condición de realizar. Sin importar lo descabellada que parezca la necesidad de sus clientes, Rappi promete hacer el favor.
https://www.instagram.com/p/BdF0Q9bAbdb/
Actualmente, esta empresa unicornio colombiana está presente en Chile, Brasil, Argentina, Uruguay y México y los pedidos recibidos a través de su plataforma, aumentan un 25% cada mes.
En vista de su acelerado crecimiento, hace poco, la empresa fue beneficiada con 200 millones de dólares por parte de compañía de capital de riesgo DST Global, una de las primeras firmas inversoras de Facebook, y ahora cuenta con la participación de accionistas de Andreessen Horowitz y Sequoia Capital, para invertir en su progreso. De esta manera, la primera empresa unicornio de Colombia espera consolidarse aún más en Latinoamérica y tener las herramientas necesarias para competir con otras plataformas como: Postmates, iFood y UberEats, que también hacen presencia en Latinoamérica.
Otro unicornio con sangre colombiana
Si bien Rappi es la primera empresa unicornio fundada en Colombia, antes que ella ya había nacido un unicornio con sangre colombiana. Se trata de Nubank, un banco digital fundado en Brasil, por el antioqueño David Vélez.
En marzo de 2018, la empresa recibió el estatus de startup unicornio. Además, la revista Fast Company la catalogó como una de las diez empresas más innovadoras de América Latina de ese año.
Según lo explica su fundador, la empresa no cuenta con una planta física, pues sus clientes manejan su tarjeta de crédito, abren cuentas bancarias y realizan todas las transacciones, desde su celular.
¿Cómo surgió Nubank?
En 2007, David Vélez se encontraba adelantando un MBA en Estados Unidos y comenzó a trabajar para Sequoia Capital, un fondo de tecnología global que ha apoyado el surgimiento de empresas como: Yahoo, YouTube, Apple, Oracle y Google, entre otras.
En cierto momento, los directivos de la compañía decidieron abrir sus oficinas en Brasil, con el fin de invertir en empresas de tecnología de ese país. Sin embargo, tras dos años de operaciones, concluyeron que no se contaba con un volumen suficiente que justificara su permanencia allí y se retiraron.
Entonces, según lo indica Vélez, convencido de las oportunidades en materia de negocios que habían en Brasil y cansado de participar en ellos como inversionista, decidió quedarse en el país carioca y darle forma a su emprendimiento.
En 2013 fundó Nubank, sin imaginarse que, poco tiempo después, se convertiría en el primer colombiano en crear una de las pocas empresas unicornio de Latinoamérica.
Startups unicornio en América Latina
A la fecha, además de Rappi y Nubank, el mercado latinoamericano cuenta con otras nueve empresas unicornio.
B2W y Tovts, fundadas en Brasil, consiguieron superar en poco tiempo la anhelada cifra de los mil millones de dólares, lo cual las convirtió en empresas unicornio. Lo mismo ocurrió con las compañías mexicanas Sofftek y Kio Networks; con Globant, Despegar, OLX y Mercado Libre, cuatro empresas de origen argentino y con Crystal Lagoons, de Chile.
El importante logro conseguido por estas empresas, demuestra que sí es posible emprender negocios en el mercado latinoamericano, que logren altas valoraciones. Además, pone de manifiesto la confianza que hay actualmente en los inversionistas extranjeros frente a los proyectos que demuestren tener potencial en la región.
Pero… ¿qué sucede con los pequeños emprendimientos que también buscan financiación para fortalecerse?
Backstage Capital es una organización dedicada a financiar empresas fundadas por minorías étnicas, por mujeres y por integrantes de la comunidad LGTB (Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales), cuyos emprendimientos, según la entidad, son constantemente ignorados por los grandes capitalistas de riesgo. De acuerdo con la institución, tan solo un 10% de los acuerdos de inversión que se cierran son para mujeres, homosexuales y afrodescendientes.
Conscientes de esa situación, a principios de 2017, Aniyia Williams, Astrid Scholz, Jennifer Brandel y Mara Zepeda, cuatro mujeres que se sentían frustradas y cansadas de las grandes dificultades que se les presentaban para obtener financiación para sus propias startups tecnológicas, decidieron darle vida al «movimiento cebra».
Este movimiento fue creado con el propósito de empoderar a aquellos emprendedores que estaban quedando a la sombra de los unicornios, debido a la evidente tendencia de Silicon Valley de invertir en cierto tipo de empresas excluyendo, según ellas, a las compañías fundadas por mujeres y algunas minorías étnicas. Y es que, a la fecha, tan sólo dos de las llamadas empresas unicornio fueron fundadas por mujeres. Se trata de Fab y Gilt Groupe.
Unicornios vs Cebras
Según Aniyia Williams, una de las cofundadoras del movimiento, cuyo lema es «las cebras pueden arreglar lo que los unicornios estropean», existen cuatro grandes diferencias entre las empresas cebra y las empresas unicornio. Ellas son:
- Las cebras trabajan por una prosperidad sostenible. Los unicornios, por su parte, buscan obtener un crecimiento exponencial.
- Las cebras favorecen la pluralidad, los unicornios a los monopolios.
- Las cebras cooperan; los unicornios compiten.
- Frente al mito de los unicornios, las cebras son fieles representantes de la realidad.
Las fundadoras del movimiento cebra afirman que no esperan que las empresas unicornio dejen de existir sino que, simplemente, opinan que todos merecen tener las mismas posibilidades.
Según ellas, su propósito con este movimiento es unir fuerzas para demostrar que muchos negocios e interesantes emprendimientos se están quedando por fuera de la mira de los inversionistas que, desde su punto de vista, parecieran estar cegados por el fenómeno de los unicornios.
Y es que para nadie es un secreto que las empresas con potencial de convertirse en unicornios resultan muy atractivas para los inversores, pues suelen enfocarse en nichos de negocio con poca competencia o, incluso, sin explotar, lo que les permite convertirse fácilmente en líderes en el mercado lo cual es, en definitiva, uno de los propósitos de todo inversionista.